Antonio Peña Jumpa[1]
¿Cómo hacer efectiva la prevención y la reconstrucción de zonas afectadas en el Perú tras los huaycos e inundaciones del inesperado fenómeno del niño del 2017? Siguiendo la experiencia de fracasos y éxitos tras el terremoto de Pisco (2007), y las recomendaciones de ayuda humanitaria del Proyecto Esfera (http://www.sphereproject.org), a continuación 11 sugerencias.
- Es imprescindible organizar a la población local damnificada. Este es un trabajo propio de los vecinos damnificados, con el apoyo o promoción del municipio distrital. En caso éste se encuentre limitado, el municipio provincial y el gobierno regional están obligados a suplirlo.
- La organización básica de la población consiste en conformar asociaciones (de hecho o bajo registro municipal), por cuadras, barrios, caseríos o comunidad, dependiendo de la magnitud de la afectación y de la afinidad de los integrantes. No es recomendable que exista más de una asociación en una cuadra, porque limitará una acción conjunta.
- Cada asociación de damnificados se compone de una asamblea general y una directiva. La asamblea es la autoridad máxima donde se deciden las acciones y medidas a tomar a favor de toda la asociación, y donde se elige y revoca a la directiva. La directiva se integra por cuatro miembros principales: presidente/a, secretario/a, tesorero/a y fiscal. Adicionalmente se pueden elegir comisiones de trabajo para actividades específicas.
- En periodos de crisis o emergencia, la asamblea de la asociación se reúne continuamente, por la mañana y la tarde, en forma diaria o como lo estimen sus miembros. La directiva es responsable de estas reuniones y su conducción.
- Toda ayuda de bienes y servicios de los gobiernos locales, regionales y el nacional, así como de las instituciones privadas, se viabiliza a través de la directiva de la asociación. La directiva informa inmediatamente a la asamblea de su asociación sobre la ayuda recibida, y en ésta se toma la decisión de distribución, ejecución o administración de dicha ayuda.
- La directiva, o comisión que se designe, está obligada a buscar o gestionar ayuda en caso ésta no llegue a su asociación. Esta búsqueda o gestión se focaliza en las principales necesidades: agua, alimentos, promoción de la higiene y refugio (carpas o viviendas provisionales).
- La directiva de la asociación también es la principal responsable de informarse de las medidas o gestiones que se realizan a nivel local, regional y nacional. Por ejemplo, es urgente informarse del contenido del Decreto de Urgencia Nro. 004-2017 publicado por el gobierno nacional el 17 de marzo de 2017. En este Decreto de Urgencia se regula la conformación y ejecución de un fondo especial para la reconstrucción y se regula la entrega de un bono familiar habitacional para quien ha perdido su vivienda. Una vez informada, esta directiva comparte la información con la asamblea de la asociación.
- Para la evaluación de necesidades y capacidad de respuesta, así como para la realización de obras o servicios por algún gobierno u órgano del Estado (local, regional o nacional) o una institución privada, la asociación de damnificados se constituye en la unidad básica de coordinación y ejecución. Si los miembros de la asociación son los beneficiarios de dichas evaluaciones, obras o servicios, tienen todo el derecho de dar su consentimiento y fiscalizar su realización.
- La transparencia y honestidad son fundamentales en el ejercicio de funciones de las autoridades, funcionarios y población en general. Cualquier miembro de la asociación tiene el deber de denunciar si una autoridad, funcionario, directivo o miembro de su asociación ofrece o recibe una coima, beneficio o comisión ilegal para favorecer la evaluación o la realización de alguna obra o servicio.
- La Contraloría General de la República y el Ministerio Público trabajan de la mano con las asociaciones de damnificados.
- En la realización de las obras o servicios públicos, los siguientes principios son exigibles:
- El dinero o capital con que se paga la obra o servicio lo gestiona la autoridad estatal pero pertenece a los damnificados.
- El capital estatal se invierte en las zonas de los damnificados, y gira o reinvierte en su entorno.
- Las personas o empresas a cargo de la obra o servicio son del lugar o están comprometidas en compartir y/o reinvertir sus beneficios en el lugar.
- Las autoridades del Estado promueven que los propios damnificados trabajen organizadamente en la reconstrucción, y se beneficien del capital estatal invertido.
Lima, 21, 22 y 31 de marzo de 2017
[1] Profesor Principal de la Pontificia Universidad Católica del Perú. Abogado, Magister en Ciencias Sociales y PhD. in Laws.
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